DECORACIÓN BODAS VINTAGE, EL ESTILO QUE SE REINVENTA CADA TEMPORADA
Vintage, clásico, retro…, son algunos de los adjetivos que se utilizan para definir accesorios, estilos u objetos que no llegan a ser “antigüedades” pero que tienen cierta edad y que se han revalorizado con el tiempo. Actualmente, se están utilizando, con gran acierto, como recursos decorativos de una nueva tendencia que ha pegado muy fuerte en los últimos años: el estilo vintage.
Debido a este fuerte impacto y al “abuso” que se hizo de esta tendencia en moda y en el mundo de la decoración, el estilo vintage se ha visto obligado a rediseñar sus estructuras para ofrecer una nueva “cara” y adaptarse a los tiempos actuales sin quedar desfasado o “manido”.
Claves para decorar una boda vintage
La decoración de bodas vintage son únicas en su especie. Fácilmente identificables por su delicada decoración y por su exquisita planificación, son ceremonias muy personales, adaptadas al gusto de los contrayentes, donde el eje central de la celebración lo conforma la decoración basada en objetos antiguos como llaves, botellas de cristal, jarrones de cerámica, flores naturales, cajas de madera, encajes…, todo enfocado a crear un ambiente de ensueño, que convierte este tipo de celebraciones en un evento único e inigualable.
El cuidado de los detalles: localización
A diferencia de otras tendencias, el estilo vintage necesita de una gran organización y coordinación entre todos y cada uno de los elementos que compondrán la ceremonia. Por tanto, el lugar elegido para celebrar la celebración ha de estar en consonancia con el estilo general y con el resto de elementos decorativos en particular, creando ese ambiente característica de sueños y fantasía. Por ello, se recomiendan los edificios antiguos con grandes salones, algún restaurante con apariencia clásica o ubicaciones más naturales si se opta por los estilos “boho” o “beach”.
Colores suaves y delicados
El color también es clave dentro del conjunto de la decoración vintage para bodas. Este tipo de celebraciones destacan por su sutileza, delicadeza y exquisitez, y necesitan de tonos neutros, claros o crudos para ofrecer esa tranquilidad y placidez que las caracterizan. Por este motivo, siempre se recomienda la elección de un tono neutro como hilo conductor de toda la ceremonia para posteriormente incluir detalles en colores suaves como el lavanda u otros colores de temporada como el rosa “Quartz”, el azul “Serenity” o el verde “Limpet Shell”, tonos tendencia para este 2016 en bodas.
Carteles vintage y lettering
Los mensajes románticos en invitaciones, misales, meseros y paneles indicadores, son detalles únicos que marcarán la diferencia de cualquier celebración vintage. Mucho más si se realizan con caligrafía manuscrita, de forma totalmente manual y sobre materiales muy “retro” como son la madera decapada o desgastada y la pizarra.
La mesa también vintage
Como hemos comentado anteriormente, es clave que toda la decoración de bodas vintage esté coordinado y respondan al mismo estilo. Es por esto que la decoración de las mesas tiene que tener ese halo de antigüedad, pudiéndose utilizar vajillas antiguas con estampados florales muy sutiles o con finos bordes dorados, a juego, por ejemplo, con la cubertería.
Para la decoración textil en las mesas, puede optarse por las puntillas o el ganchillo, o bien por una mantelería blanca bordada sobre materiales finos como la seda, para dejar el protagonismo al resto de elementos del montaje.
Para rematar el conjunto, se recomiendan centros en vidrio o porcelana fina con flores de colores suaves (rosas pequeñas, peonías, gardenias o lavandas) así como cajitas de madera con algún otro tipo de flores silvestres.
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