CASTAÑADA MODERNA Y ACOGEDORA: TRADICIÓN CON UN TOQUE MODERNO
La Castañada es una de esas celebraciones que huelen a tradición, a hojas secas bajo los pies y al aroma inconfundible de las castañas asándose al fuego. Pero, ¿quién dice que lo tradicional no puede ser también moderno y sofisticado? Este año, te proponemos reinventar esta fiesta otoñal con decoración de otoño y material rústico de alquiler que transformará tu Castañada en un evento inolvidable.
La esencia de la Castañada: tradición que perdura
La Castañada, celebrada la víspera de Todos los Santos, es mucho más que comer castañas y boniatos. Es reunirse con la familia, compartir panellets caseros y brindar con moscatel mientras las historias de siempre vuelven a contarse. Pero esto no significa que debamos resignarnos a celebraciones improvisadas o espacios poco cuidados.
Hoy en día, cada vez más familias buscan crear ambientes acogedores que honren la tradición pero que también aporten ese toque especial que hace que todos quieran sacar el móvil para inmortalizar el momento. Y aquí es donde entra en juego la magia de una buena planificación.
Mesas rústicas: el corazón de tu celebración
El elemento central de cualquier Castañada son las mesas donde compartir. Las mesas rústicas de alquiler se han convertido en la opción favorita para quienes buscan ese equilibrio perfecto entre calidez tradicional y estética cuidada.
Imagina largas mesas de madera maciza con su textura natural, capaces de acoger a toda la familia alrededor. Estas piezas no solo son funcionales, sino que aportan ese punto de autenticidad que conecta directamente con el espíritu otoñal de la celebración. Combinadas con sillas de madera, o incluso algún sofá para crear ese ambiente de convivencia informal pero elegante que caracteriza las mejores reuniones.
Lo mejor de optar por el alquiler es que puedes elegir el tamaño y estilo exacto que necesitas sin preocuparte por el almacenaje posterior. Desde mesas altas tipo cóctel para el aperitivo hasta grandes mesas comunitarias para la cena principal.
Mantelería que marca la diferencia
Si las mesas son el lienzo, la mantelería es lo que define el estilo de tu Castañada. Aquí tienes varias opciones según el ambiente que quieras crear:
Opción natural: Manteles de lino en tonos crema, beige o granate que permiten que la madera de las mesas luzca parcialmente. Puedes combinarlos con caminos de mesa en arpillera o yute para acentuar el toque rústico.
Opción moderna: Manteles lisos en colores otoñales profundos como el ciruela, girasol o el verde eucalipto. Estos tonos aportan sofisticación sin perder la conexión con la estación.
Opción mixta: Deja las mesas al natural y utiliza individuales o pequeños tapetes en cada puesto. Esto permite apreciar la belleza de la madera mientras proteges la superficie.
La clave está en elegir textiles de calidad que aporten calidez visual pero que también sean prácticos. Recuerda que en una Castañada las manchas de castañas asadas son casi inevitables, así que el alquiler de mantelería profesional te libera de preocupaciones.
Decoración otoñal: los pequeños detalles que enamoran
La decoración de otoño es lo que transformará tu espacio de ordinario a extraordinario. Y aquí es donde puedes jugar con elementos naturales y modernos:
Centros de mesa: Combina calabazas pequeñas, piñas, ramas secas y velas en portavelas de cristal o metal envejecido. Añade alguna granada abierta o higos para aportar color y textura. Los centros de mesa no deben ser altos para permitir la conversación entre comensales.
Iluminación: Las guirnaldas de luces cálidas, o las lámparas Bombi que puedes ver en nuestra web, crean una atmósfera mágica cuando cae la noche. Combínalas con faroles de distintos tamaños y velas en diferentes alturas para conseguir ese ambiente acogedor que invita a quedarse.
Vajilla y cristalería: Opta por platos de porcelana artesanal en tonos marfil o beige o incluso bandejas de madera para servir las castañas, boniatos y panellets. Los vasos de cristal transparente o ligeramente ahumado complementan perfectamente la estética rústica sin recargar.
El espacio: interior o exterior
Una de las ventajas de celebrar la Castañada a finales de octubre es que aún puedes aprovechar espacios exteriores si el clima acompaña. Un jardín, una terraza o incluso un patio pueden transformarse en el escenario perfecto con el material rústico adecuado.
Para espacios exteriores, considera alquilar estructuras como carpas que protejan del relente sin perder la conexión con el entorno. Añade mantas de cuadros en cestos para que los invitados puedan abrigarse cuando refresque, un detalle que además suma puntos decorativos.
Si celebras en interior, puedes recrear el ambiente otoñal con elementos naturales: ramas en jarrones altos, hojas secas esparcidas sobre la mesa o incluso pequeños troncos como elementos decorativos.
Propuestas prácticas para tu Castañada moderna
Zona de asado: Crea un rincón específico para asar las castañas con una mesa auxiliar rústica donde preparar y servir. Puedes utilizar recipientes de zinc o cobre para presentarlas de forma original.
Rincón del moscatel: Monta una mesa pequeña con distintas variedades de vino dulce, copas adecuadas y un cartel hecho a mano con caligrafía bonita. Añade uvas frescas como decoración.
Estación de panellets: Presenta estos dulces tradicionales en bandejas de madera escalonadas, separados por tipos y decorados con elementos naturales como hojas o flores secas.
La ventaja del alquiler profesional
Apostar por el alquiler de mobiliario para eventos no solo te garantiza piezas de calidad y en perfecto estado, sino que te permite experimentar con diferentes estilos sin comprometerte a largo plazo. Además, te olvidas de la logística de almacenaje, limpieza y transporte.
En Dasler entendemos que cada celebración es única. Por eso ofrecemos desde la mesa más sencilla hasta el montaje completo con mantelería y decoración para fiestas, siempre con ese toque especial que hace que tu Castañada pase de ser una comida familiar más a convertirse en un recuerdo que todos querrán repetir.
Este año, atrévete a darle a la tradición el marco que se merece. Porque honrar nuestras raíces no significa renunciar al estilo, sino celebrarlas de la mejor manera posible.

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